miércoles, 16 de octubre de 2013

El parto desde mi experiencia

Totalmente de acuerdo con el artículo de Bebés y Más: "Por qué una mujer no debería ir a dar a luz con miedo".

Las futuras mamas no deberían de hacer caso de lo que les dicen las "conocidas"...

Yo iba aterrada al parto, un mes antes ya estaba asustada y sólo deseaba que todo fuera bien, que no doliera mucho y que fuera muy rápido. Quería verle la carita a mi peque pero... me daba mucho miedo el que iba a pasar, si lo haría bien,...

Os cuento mi caso por si a alguna futura mamá le sirve...

Empecé con contracciones una noche de viernes a sábado a las 2 de la mañana... estuve toda la noche sin dormir y durante todo el sábado... más de lo mismo!!!

Las contracciones eran cada vez más fuertes pero se acercaban en el tiempo y se espaciaban, quiero decir, eran cada 10 minutos durante media hora y luego se me espaciaban cada 20 minutos...

Fui al hospital (porque me insistieron mis familiares) y me dijeron que... para casa!!! (lógico, no era parto...)

La noche del sábado al domingo ingresé de parto a las 5 de la mañana y...


Bendita epidural!!!

Yo no estaba segura si ponérmela pero... después de todo el fin de semana sin dormir y con dolores...

La supliqué!!!

Me la pusieron sobre las 10 de la mañana y pude descansar después de 32 horas de dolores (no de parto).

Mi hija nació a las 21:05 horas del domingo...

Es cierto que dolió, es cierto que lloré en varias ocasiones (antes de la epidural), es cierto que fue largo y que no sabía a lo que iba pero... casi un año después lo recuerdo como una experiencia única, maravillosa y no recuerdo tanto el dolor como la impaciencia por abrazar a mi personita.

Los médicos de hoy en día son todos unos profesionales, estás acompañada en todo momento por TU matrona y la persona que tú elijas. Todo es diferente a hace 20 o 30 años en los que tuvo tu "vecina" a sus hijos...

Estuve sola en dilatación acompañada por una matrona y una matrona en prácticas. Por supuesto el papá de la criatura también estaba y sólo se separó de mi lado cuando vino la anestesista a ponerme la epidural y cuando me quedaba dormida porque, como sabía que estaba en buenas manos, salía a comer, tomar el aire,... (normal, los nervios no los pasa sólo la mamá...).



En dos ocasiones la matrona hizo una excepción y acompañó al papá a la puerta para dejar pasar a mi madre que estaba nerviosa e impaciente en la sala de espera (lógicamente, preocupada por su hija y su nieta). Normalmente esto no lo dejan hacer, si dices que entra tu marido sólo puede acceder él a tu habitación mientras estás dilatando.

Aunque yo llevaba mi móvil, no tenía cobertura e incluso me dejaron hacer una llamada desde su teléfono para relajar a los familiares que estaban en la sala de espera.

Cuando el parto empezó a ser largo, empezó a desfilar por la habitación varios ginecólogos para ver que todo estaba bien, tanto mi bebe como yo, pero como no se encajaba (ponía la oreja en vez de la coronilla) yo no acababa de dilatar los 2 centímetros y ya llevaba 14 horas de parto...

De repente, a las 20:50 horas, decidieron que lo iban a intentar con sólo 8 centímetros de dilatación pero, como igual iba a ser un parto instrumentado, sobre las 21 horas hicieron salir al papá de la habitación. También tenían el quirófano preparado por si tenían que hacerme una cesárea.

A las 21 horas era el cambio de turno y nadie se quiso perder el gran momento!!!

Aún no había salido el papá del pasillo de maternidad cuándo le llamaron para que entrara a conocer al nuevo miembro de la familia (salió a las 20:55 y entró a las 21:05). Cuando volvió a entrar el la habitación... CASI LE DA UN SOPONCIO!!!



Allí estaban todos los del equipo de maternidad... el "jefe", 4 ginecólogos, 2 neonatólogos, 2 matronas, 2 matronas en prácticas, 4 enfermeras,...

Su susto fue monumental, creía que le había pasado algo a la peque o a mí pero.. NOOOO, es que unos salían a las 21 horas y otros entraban a las 21 horas y claro, los pobres que llevaban conmigo desde las 5 de la mañana... querían conocerla!!! Los demás entraban a trabajar y tenían que estar si o si...

Cuándo vi a mi pequeña TODO, TODO, ABSOLUTAMENTE TODO lo vivido desde las 2 de la madrugada del viernes al sábado, se me olvidó.

Lógicamente todavía recuerdo que pasé un "mal" fin de semana pero, la recompensa fue muuuucho mayor.



Sinceramente recuerdo más todo el repertorio de canciones de Nino Bravo que estuvimos escuchando (y cantando entre contracción y contracción) durante todo el sábado y, sobretodo, el momento en que pusieron a mi niña sobre mi pecho y sentí una inmensa felicidad, tan grande que es inexplicable y que sólo la entiende quien la ha vivido (nunca he llorado tanto de alegría como aquel día).

El artículo de Bebes y Mas es totalmente cierto. Lo mejor es ir tranquilas, sin miedo y preparadas para colaborar para hacer el parto lo mejor y más rápido posible.

Yo nunca hice mucho caso de las "vecinas" pero lógicamente te van asustando poco a poco. Pero... si nuestras abuelas tenían 4, 5, 6 hijos en casa y entonces no había epidural... no iba a ser yo capaz de tener yo a mi peque con los avances en medicina que hay hoy en día???

Siempre puede haber sustos, urgencias o, incluso, malos finales pero, cuánto más tranquila y colaboradora esté la mamá, mejor saldrá todo.

Y recordad que: 1º, es algo que va a merecer la pena SEGURÍSIMO. 2º, en cuanto le veáis su carita se olvida el dolor.

Ánimo futuras mamas del siglo XXI y que tengáis una hora cortita!!!

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